Grandes catástrofes pueden empezar como ideas geniales.
La mía inició con la ida a la tienda a comprar unas galletitas para acompañar mi café. Ya en la tienda dije ¿por qué gastar en galletas si puedo hacerlas y mejores? Así que salí con un paquete de harina preparada para las susodichas.
Después del éxito obtenido con mis bombas calóricas me dije ¿por qué no hacerle un pastel a la "L" por su cumple?
El fallo en mi secuencia de pensamientos es que no es lo mismo hacer galletas que pastel y yo nunca he llevado una buena relación con mi horno en materia de postres.
Mientras hacía el pastel, me comía las galletas.
Sería la energía inducida por tanta azúcar o sencillamente mi ineptitud para la elaboración de repostería que el pastel de chocolate salió hecho un engendro quemado por debajo y crudo por dentro.
Me lo tuve que comer, cómo iba yo a andar de desperdiciada.
No hay desastre sin enseñanzas:
1. Ya sé lo que significa "empacho".
2. La cocina no es lo mío.
3. El pastel de "L" lo voy a mandar hacer, que por eso hay gente capacitada para ello.
4. La necesidad de estar trague y trague no es sino efecto de la cantidad de cosas que tengo que hacer este mes y todavía no empiezo.
Enmedio del dolor de estómago que aun traigo, me he propuesto ponerme a trabajar.
No hay de otra.
Preocuparse u ocuparse.
(Y comer... acabo de comprar un postre de limón que luce de-li-cio-so)
Comentarios
P.S: Tu pastel y mi comentario ¿procastinación? :)
P.S. Noooooooo... qué va..... ¿también andas con pendientes?
El problema es que yo no hiberno y no sé cómo voy a bajar esos kilillos de más que voy a adquirir vía estrés y vía procrastinación.
gracias a Dios por que mi hija ya me estaba pidiendo el divorcio....
Le falta sal, le pones y se acabó el problema. Lo quemado se lo raspas o se lo escondes y hasta puedes decir que es rostizado o frito o que así decía la receta.
Pero las cosas que se tienen que inflar o esponjar o básicamente cambiar su estado físico, eso sí... es una cuestión con la que no he podido.
P.S: A mi también el estress me abre el apetito :(
oye, te recomiendo un post que hizo Andrés Bribón sobre un pastelito en el horno de microondas
Nunca has probado las harinas para pastel preparadas, que nomas las vacias, las mezclas con leche y casi se cuecen solas?. No son ricos, pero se ven tan lindos que sirven para tomarles la foto y fingir que los cocinaste tu.
El objetivo de pasar media vida preguntándese para qué vino uno aquí, debe ser pasar la otra media vida evadiendo la respuesta.
Ben: Ya chequé y se me acaba de antojar pero mucho. Sin embargo, tengo autocontrol, juro que lo tengo. Además me acabo de comer un panquecito y una rebanada de postre de limón. Puedo soportar un día más.
Todavía: A mí también me relaja la repostería, bueno, a decir verdad me relaja comérmela más que elaborarla.
Las harinas Betty Crocker hacen ese truco de nomás echarle aire a la cajita para que se preparen las cosas solas. ¿Cómo crees que me salen tan buenas las galletas con chispas de chocolate?
Claro que lo que mejor me quedaban eran las carreteritas para los autos en las montañas de tierra.