Retomando
Salir de la ciudad me implica un desbalance espacial y temporal del que me cuesta recuperarme. Pero aquí estoy.
¿Qué se puede contar de un viaje relámpago?
Un día de viaje, un día de visita en Denver, medio día de viaje, un rato de visita en Santa Fe, unas horas de viaje, descanso, comida y compras en El Paso y se acabó.
Parece muy poco y no es así. He aprendido a disfrutar cada instante de cada viaje. La frase aquélla de que el viaje no es el destino, o algo por el estilo, es de una verdad irrefutable y aunque la admitía como cierta, no es hasta hace muy poco que me parece que empiezo a vivirla.
Los hijos hacen los viajes cada vez más placenteros (especialmente cuando duermen) y la pasé divertidísima peleando con William a causa de un elogio que hice a la capacidad de Harry de disfrutar del viaje y del paisaje. William reaccionó dejándome de hablar, indicándome que ni me molestara en hablarle y que si yo fuera una madre justa querría a sus dos hijos por igual, aunque luego corrigió y dijo que si yo fuera una madre justa querría más al primogénito. Con Harry también tuve algunas desavenencias sobre todo cuando me dijo que no había visto el venado que le señalé en la carretera porque él sí vivía en el mundo real y no en el mágico mundo de mi imaginación.
Ni hablar. Nuestras cada vez más frecuentes diferencias resultan entretenidas y deliciosas.
Y ni qué decir de las charlas con Fefé en la carretera que en realidad son pocas (el paisaje nos absorbe) pero sustanciosas.
Fue un viajecito placentero, con visitas a parques y un acuario, con accidentes (no nuestros) en la carretera, con el shopping de rigor.
Festejamos el día de la madre en Santa Fe pero mi regalo llegó al día siguiente: la cuarta temporada de Northern Exposure de parte de Fefé, Thud me lo compró William y una libretita Moleskine que eligió Harry.
Ahora a dejar de soñar un rato con vacaciones, es el mes de los trabajos finales en la maestría.
Trivia: ¿Cuántas veces escribí la palabra "viaje" en este post?
¿Qué se puede contar de un viaje relámpago?
Un día de viaje, un día de visita en Denver, medio día de viaje, un rato de visita en Santa Fe, unas horas de viaje, descanso, comida y compras en El Paso y se acabó.
Parece muy poco y no es así. He aprendido a disfrutar cada instante de cada viaje. La frase aquélla de que el viaje no es el destino, o algo por el estilo, es de una verdad irrefutable y aunque la admitía como cierta, no es hasta hace muy poco que me parece que empiezo a vivirla.
Los hijos hacen los viajes cada vez más placenteros (especialmente cuando duermen) y la pasé divertidísima peleando con William a causa de un elogio que hice a la capacidad de Harry de disfrutar del viaje y del paisaje. William reaccionó dejándome de hablar, indicándome que ni me molestara en hablarle y que si yo fuera una madre justa querría a sus dos hijos por igual, aunque luego corrigió y dijo que si yo fuera una madre justa querría más al primogénito. Con Harry también tuve algunas desavenencias sobre todo cuando me dijo que no había visto el venado que le señalé en la carretera porque él sí vivía en el mundo real y no en el mágico mundo de mi imaginación.
Ni hablar. Nuestras cada vez más frecuentes diferencias resultan entretenidas y deliciosas.
Y ni qué decir de las charlas con Fefé en la carretera que en realidad son pocas (el paisaje nos absorbe) pero sustanciosas.
Fue un viajecito placentero, con visitas a parques y un acuario, con accidentes (no nuestros) en la carretera, con el shopping de rigor.
Festejamos el día de la madre en Santa Fe pero mi regalo llegó al día siguiente: la cuarta temporada de Northern Exposure de parte de Fefé, Thud me lo compró William y una libretita Moleskine que eligió Harry.
Ahora a dejar de soñar un rato con vacaciones, es el mes de los trabajos finales en la maestría.
Trivia: ¿Cuántas veces escribí la palabra "viaje" en este post?
Comentarios
Que bueno que estan de vuelta y con bien!
Alma mater? Dónde era? Boulder? Pueblo?
qué padre que ya entregarás trabaxos de la mastery, en breve presentaré mi examen profesional...
Ah y tu hijo está equivocado, si fueras una madre justa querrías más al menor...
jajajajajajaja
(yo soy hijo menor, por eso lo digo, jejeje)
Saludos.