Pa su mecha...
.. qué de visitas a la farmacia.
Hay semanas así.
Fefé anduvo con resfriado, una muela dándole lata y fiebre.
William tiene salmonellosis.
Harry ya empezó su tratamiento (a prueba).
Fefé ya anda de maravilla. En realidad las enfermedades no le pegan seguido, pero cuando le dan le dan (a mí también, cuando me dan me dan... jo). Fefé podrá ser un hermoso hombre moderno pero cuando se trata de enfermedades es un cavernícola que difícilmente admite el dolor. Además le funciona muy suave la adrenalina, apenas le duele algo le da risa. Eso es bueno. Es suficiente con dos hijos. No me gustaría un tercero.
El tratamiento de William se alargó, nomás sería una semana con antibióticos pero recayó y le cambiaron las pastillas por unas más poderosas. Se ve mejor esta mañana.
Harry empezó el tratamiento de ritalín, pese a nuestras reticencias. Tenía que darle la oportunidad. El periodo de prueba será de tres meses. Empezamos con un cuarto de pastilla hasta llegar a la pastilla completa y luego nos regresamos. Al parecer con 3/4 de pastilla le es suficiente.
De ser el niño que no terminaba los trabajos de clase, ahora es de los primeros tres niños en terminar. De dedicarle cuatro horas a las tareas por andar papando moscas, las termina en una hora y con poemas memorizados, en inglés.
Está muy motivado. Su letra ha mejorado. Hace unos días me costó trabajo no llorar cuando vi su cuaderno con las letras derechitas y sobre el renglón. Se siente muy satisfecho con sus logros. Pero las matemáticas nomás no. Ahí vamos a necesitar apoyo externo porque no logramos desentrañar el significado de las instrucciones de su libro de texto.
Yo fui al dentista ayer. Resulta que no tengo una muela del juicio chingando. Tengo tres.
Mañana me iban a quitar dos. Pero mañana después del teatro tenemos Ladies´ Night Out en un lugar de reputación dudosa y con una gasa metida en la boca no iba yo a poder gritar, cantar, pistear o fumar.
Cambié la cita y sé que entre más tiempo pasa más maricona me vuelvo. Y no me ayuda en lo absoluto andar leyendo en internet las terroríficas experiencias de gente a la que le quitaron las muelas y se volvieron impotentes. O cosas así. No puedo evitarlo. Mi morbo es mayor.
Lo que más más más más pánico me provoca de todo esto, no es el arma utilizada para sacar mis muelas, ni la sangre, ni el sabor metálico en la boca. Es el algodón.
La única vez que permití que un dentista hurgara dentro de mi cavidad bucal, no pude tener la motita de algodón metida en la boca por más de cinco minutos.
¿Qué va a ser de mí ahora?
¡Ahhh... porque no saben lo más chido!... después de las muelas, me van a poner brackets.
Pinche viejorrona de 32 años, casi 33, con brackets. Yo ésos los quise en secundaria, cuando era muy nice traer metales y ligas en la boca. Pero entonces no tenía la mordida toda descuadrada.
Después de vejez, viruela.
Prometo poner fotos de mi sonrisa.
Mientras tanto, ésta les podrá ir dando una idea de lo que van a ver de mí en los próximos meses:
Hay semanas así.
Fefé anduvo con resfriado, una muela dándole lata y fiebre.
William tiene salmonellosis.
Harry ya empezó su tratamiento (a prueba).
Fefé ya anda de maravilla. En realidad las enfermedades no le pegan seguido, pero cuando le dan le dan (a mí también, cuando me dan me dan... jo). Fefé podrá ser un hermoso hombre moderno pero cuando se trata de enfermedades es un cavernícola que difícilmente admite el dolor. Además le funciona muy suave la adrenalina, apenas le duele algo le da risa. Eso es bueno. Es suficiente con dos hijos. No me gustaría un tercero.
El tratamiento de William se alargó, nomás sería una semana con antibióticos pero recayó y le cambiaron las pastillas por unas más poderosas. Se ve mejor esta mañana.
Harry empezó el tratamiento de ritalín, pese a nuestras reticencias. Tenía que darle la oportunidad. El periodo de prueba será de tres meses. Empezamos con un cuarto de pastilla hasta llegar a la pastilla completa y luego nos regresamos. Al parecer con 3/4 de pastilla le es suficiente.
De ser el niño que no terminaba los trabajos de clase, ahora es de los primeros tres niños en terminar. De dedicarle cuatro horas a las tareas por andar papando moscas, las termina en una hora y con poemas memorizados, en inglés.
Está muy motivado. Su letra ha mejorado. Hace unos días me costó trabajo no llorar cuando vi su cuaderno con las letras derechitas y sobre el renglón. Se siente muy satisfecho con sus logros. Pero las matemáticas nomás no. Ahí vamos a necesitar apoyo externo porque no logramos desentrañar el significado de las instrucciones de su libro de texto.
Yo fui al dentista ayer. Resulta que no tengo una muela del juicio chingando. Tengo tres.
Mañana me iban a quitar dos. Pero mañana después del teatro tenemos Ladies´ Night Out en un lugar de reputación dudosa y con una gasa metida en la boca no iba yo a poder gritar, cantar, pistear o fumar.
Cambié la cita y sé que entre más tiempo pasa más maricona me vuelvo. Y no me ayuda en lo absoluto andar leyendo en internet las terroríficas experiencias de gente a la que le quitaron las muelas y se volvieron impotentes. O cosas así. No puedo evitarlo. Mi morbo es mayor.
Lo que más más más más pánico me provoca de todo esto, no es el arma utilizada para sacar mis muelas, ni la sangre, ni el sabor metálico en la boca. Es el algodón.
La única vez que permití que un dentista hurgara dentro de mi cavidad bucal, no pude tener la motita de algodón metida en la boca por más de cinco minutos.
¿Qué va a ser de mí ahora?
¡Ahhh... porque no saben lo más chido!... después de las muelas, me van a poner brackets.
Pinche viejorrona de 32 años, casi 33, con brackets. Yo ésos los quise en secundaria, cuando era muy nice traer metales y ligas en la boca. Pero entonces no tenía la mordida toda descuadrada.
Después de vejez, viruela.
Prometo poner fotos de mi sonrisa.
Mientras tanto, ésta les podrá ir dando una idea de lo que van a ver de mí en los próximos meses:
Comentarios
OGC: Estoy enojada con los de Kumon. Muy muy enojada. Más bien necesito una maestra normalista que en las tardes dé asesoría y le eche la mano con las tareas. Porque el problema no es que no las entienda, lo que no entendemos son los libros.
Oye, me da mucho gusto lo de tu hijo, sabes de que yo tengo un problema similar (creo que ya lo habia externado) y apeeeeenas nos van a dar cita con una doctora que es la "muu" sagrada en esos menesteres. Espero que de resultados porque ya me ha hablado el mismisimo director de la escuela un par de veces a mi cel y no sabes ni que decir... en fin.
Excelente post... sera por el reflejo? jejeje saludos y veras que todo sale bien con tus muelas enjuiciadas.
Mr. Magoo
P.D. Y si, el karate como que si funciona, a mi chavo lo metimos hace unos meses y es de las pocas veces que lo veo enfocado y bastante motivado.
Y a la mejor con las matematicas yo puedo ayudarlo, si te interesa...
Ya. relajada.
Que te vaya muy bien con la doctora.
Big Bro, el caso de Harry es indocumentable. El mío ha tenido un solo reporte en sus cinco años y medio de vida estudiantil y fue por andar de enamorado. Jamás me han hablado de la escuela para ver problemas de conducta. El primo, mmm, el primo es otro caso, también indocumentable. Pero como se lee en una playera que tiene Harry "I am lazy, loud but I am fun" y se aplica también a tu hijo.
No, suena como perversión, antinatura... enfrente como Betty La Fea.
Supongo que si te recetaron antibiótico para antes de la extracción es probable que tampoco se te inflame, aunque sean dos muelas.
Suerte con eso.
Nosotros que tenemos vicios, fumamos, bebemos, nos pasan cada cosas...
También estoy tomando antibióticos. Pensaré positivamente.
OCG: Mi experiencia con Kumon fue haberles fregado cuatro años por la franquicia para ni siquiera avisar cuando pusieron la oficina aquí. Por eso los odiamos mucho.. quesque nos iban a tener informados cuando les interesara poner franquicia en la ciudad... y nada... pinchis... sniff...