Cierre de periodo

Así le dicen en mi trabajo a la semana final del mes, del año.

Es cierre de período y estoy en el trabajo sin poder hacer mucho porque… cierre de período. Los sistemas están ocupados con el personal calculando los últimos números. Creo que igual que yo, echando cálculos finales a mi presupuesto.

De acuerdo con mi primer post del año, me propuse hacer algunos cambios y aquí van los resultados:

• Salud: En términos generales, sí tomé más agua, usé la elíptica y consumí menos azúcares; sin embargo, algo que no me había propuesto simplemente lo hice: dejé de fumar. Ya tengo siete meses y la verdad no fue tan difícil.

• Medioambiente: Ya no se me olvida bajar mis bolsas y tengo incluso bolsitas de red para las verduras. He estado probando diferentes productos cosméticos sin empaque, porque en casa se desecha mucho plástico de productos de cuidado personal. Estoy a punto de probar con recetas para hacer cremas sólidas. Tal vez luego pueda aprender a hacer shampoo y acondicionador. En casa ya estamos separando vidrio y cartón. Nos falta un montón y sabemos que nuestra aportación al problema que tenemos encima es mínima, pero no por eso podemos dejar de hacerlo.

• Familia: Mis hijos siguen aquí. Burros. Felizota. Están estudiando y bastante contentos con las elecciones que hicieron. Yo con ellos. Por otro lado, tuve oportunidad de llevar a mi mamá a visitar a sus hermanas. Me enteré de muchas cosas. Estas Córdova están cabroncísimas y no puedo menos que intentar aprender de ellas. Es una deuda.

• Trabajo: No pude. Estoy cómoda, confortable y eso es agradable un rato, pero insostenible por mucho tiempo. Este año empezaré a buscar otra cosa y terminaré la maestría.

• Autocuidado: Aunque no pude encontrar la clase que buscaba, sí me reservé cierto tiempo para mí y las cosas que me gusta hacer. Leí autoras maravillosas, escuché podcasts muy interesantes y sembré un jardín. 

• Y en un orden más práctico, cancelé una tarjeta de crédito y en un par de meses cancelo otra. La deuda de la casa se hizo más pequeña y manejable. Decidimos vender la otra casa este año e invertir. Hemos estado aprendiendo.

Esto de ninguna manera constituye un resumen del año. Una lista no es más que un intento de control y contención de un fluido interminable. Y no me disgusta, pero la vida es más por supuesto. Yo quiero seguir viviendo más y detenerme a veces a mirar mi lista.

No tengo propósitos para la nueva década.

Felices fiestas para ustedes también.